que el filósofo debe tener (a diferencia del artista, que necesita una infancia infeliz) una infancia feliz y no resignarse nunca a que ésta se ha perdido; tiene que estar convencido de que antes de él no se ha pensado realmente nunca y que todos los sistemas anteriores surgen de charlatanes; tiene que sentirse a gusto en el infierno. En: http://www.elmundo.es/elmundolibro/2000/ 07/07/anticuario/962902173.html
El Big Bang fue la expulsión del paraíso